Opinión | Soberanía a cambio de seguridad
- Jorge Salcido
- 5 nov 2019
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 7 nov 2019
Nuestro estado lleva años siendo rehén del crimen organizado, y aunque estamos conscientes de que la violencia no se generó en este gobierno, no podemos dejar de señalar las deficientes estrategias de seguridad nacional, que de nueva cuenta vuelven a fallarnos al pueblo mexicano. No es necesario que nos recuerden que los gobiernos anteriores nos dejaron al país hecho un cementerio a causa del fuego cruzado que comenzó el gobierno de Felipe Calderón, y que a partir de ahí no ha hecho más que fortalecerse y agravarse. Estamos cansados del mismo discurso mañanero en el que se señala a anteriores administraciones las desgracias que ocurren al día de hoy, ya lo sabemos señor presidente, ahora qué es lo que piensa hacer, la nueva estrategia parece más preocupada por velar por los intereses migratorios del país vecino que por el bienestar de la nación, porque eso si, en la frontera tenemos a la guardia nacional armada “hasta los dientes”;el plan de Paz y Seguridad no está dando resultados, y eso lo podemos ver todos desde los hechos ocurridos en Culiacán el pasado 17 de octubre, pero lo que nos mora el día de hoy es otro hecho violento y horrorífico.
El día de ayer en los limites del estado de Chihuahua y Sonora, miembros de la familia Le Barón fueron emboscados por sicarios, lo cual dejó un saldo de nueve muertos: tres mujeres y seis niños. La Colonia Le Barón del municipio de Galeana es una de las comunidades mormonas que se localizan en la zona del noroeste del estado de Chihuahua muy cercana las otras dos colonias mormonas sobrevivientes, Colonia Juárez, del municipio de Casas Grandes, y Colonia Dublán del municipio de Nuevo Casas Grandes.
La familia Le Barón se ha visto en la mira de la prensa internacional debido a la inseguridad que ha morado en su comunidad desde hace muchos años a causa del derramamiento de sangre causado por la guerra contra el narcotráfico en nuestro país. En el 2009 los “Lebarones” sufrieron algunos sucesos lamentables: el 2 de mayo de ese año fue secuestrado Erick Le Barón, por el cual, el grupo criminal de “Los plagiarios” pedía un millón de dólares por su liberación; sin embargo, la comunidad decidió no pagar, en cambio la comunidad liderada en ese entonces por Benjamín Franklin Le Barón Ray, decidieron encabezar un movimiento social en contra de los secuestros, a pesar de que Erick fue liberado a los días, los plagiarios tomaron represalias a un par de meses después. El 6 de julio contra Benjamín quien fue asesinado junto a Luis Widmar Stubbs, otro miembro de la comunidad, y dejaron una manta frente a sus domicilios donde especifican que el asesinato era una respuesta a causa de su activismo en contra de la inseguridad.
Hoy esta familia vuelve a estar en boca de la nación; incluso ahora a nivel internacional debido a las declaraciones del presidente de los Estados Unidos de América, Donald Trump, a través de su cuenta de Twitter: “Una familia y amigos maravillosos de Utah quedaron atrapados entre dos viciosos carteles de la droga, que se disparaban el uno al otro, con el resultado de la muerte de grandiosos estadounidenses -incluidos niños pequeños- y algunos desaparecidos”, “Si México necesita o solicita ayuda para limpiar estos monstruos, Estados Unidos está listo, dispuesto y capaz de involucrarse y hacer el trabajo de manera rápida y efectiva”. “El grandioso nuevo presidente de México ha hecho de esto un gran tema, pero los carteles se han vuelto tan grandes y poderosos que a veces necesitas un ejército para derrotar a un ejército!”
A partir de estos comentarios las opiniones han quedado divididas en el país, debido a que se escuchan comentarios de la población que expresan abiertamente que se le tome la palabra al presidente Trump; sin embargo, el mandatario Andrés Manuel López Obrador ha contestado que no piensa combatir la violencia con violencia, además añadió en su mañanera que :
“Le agradecemos mucho al presidente Trump, a cualquier gobierno extranjero que quiera cooperar. Pero, en estos casos, nosotros tenemos que actuar con independencia, de conformidad con nuestra constitución y con nuestra tradición de independencia y de soberanía. Voy a hablar con el presidente Trump para agradecerle su apoyo, ver si en el marco de los acuerdos internacionales vigentes solicitaríamos ayuda. Creo que no necesitamos para atender estos casos, de la intervención de un gobierno extranjero, todo esto de manera muy respetuosa. Somos un país libre y soberano, no puede intervenir otro gobierno en nuestro territorio, si no existe un acuerdo y la solicitud expresa de nuestro gobierno”
Desde un punto muy particular yo abiertamente expreso, que la soberanía nacional no puede verse comprometida por los intereses de agendas extranjeras, a pesar de que el país vecino se ha “solidarizado”, no podemos tener la memoria tan corta, este suceso fue terrible, pero tristemente es la realidad que vivimos todos los mexicanos día con día, todos conocemos a alguien que ha peleado hasta el cansancio con las autoridades para buscar a algún ser querido desaparecido o luchar para que un asesinato no quede impune; sin embargo, sus voces nunca son escuchadas.
En esta ocasión Estados Unidos está involucrado en este caso, ya que siempre en la región del noroeste se ha considerado a la comunidad Le Barón como una colonia estadounidense dentro del territorio mexicano, de no ser así, este suceso a el tema de seguridad al gobierno norteamericano no le habría importado al gobierno norteamericano, así como cualquier otro hecho violento que desafortunadamente suceden nuestro país a diario, en el que se han asesinado y desaparecido familias desde hace años. Y si aunque el presidente Trump se mostró “solidario” con el pueblo mexicano el pasado 19 de octubre, al hacer un acuerdo con AMLO para “congelar” el tráfico de armas, debido al suceso ocurrido en Culiacán, no debemos olvidar que ese trato solo funciona como moneda de cambio si México soluciona el problema estadounidense de los migrantes. Como ciudadanos mexicanos debemos comprender que una intervención extranjera y una guerra contra el narcotráfico no es la solución, y la historia de nuestro país lo respalda, debemos recordar un pensamiento de Benjamín Franklin que me he dado la libertad de modificar, “Un pueblo que cede su soberanía y su libertad a cambio de seguridad, no merece ni libertad ni seguridad”.
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